El conflicto que revela la pieza Highlighted Privacy. Stories #06 tiene que ver con el sentido de desvelamiento en el arte. Condensa en un marco de resina y fibra de vidrio la tradición de una forma de mirar heredada de la pintura, que representa lo que es visible, lo que es escena, lo que está vivo y por lo tanto puedo conocer. Como marco, contiene dos direcciones, es decir se comporta tanto a modo de ventana desde la que observar, como un hueco desde el que ser mirado. Esta dualidad, que es inherente al gesto de la observación, se torna en la actualidad en una problemática más dentro de la variedad de roles tecnológicos que las imágenes encarnan a nuestro alrededor. La tecnología, en términos de leguaje y uso para “el/la usuario/a”, trata de ser cercana, cotidiana y facilitadora de tareas. Casi una ventana al mundo a través de un dispositivo que continuamente nos desvela información y nos revela a nosotras mismas hacia el exterior. Esta pieza es en realidad una interfaz, un telón que constantemente hace intento de caer, pero se mantiene fijo virtualmente. Esta dimensión espacio/virtual expone un problema centrado en el vínculo sujeto-objeto, y el lugar que ocupa cada uno en la relación que se establece de acople.
Stories #06 es una aplicación de una red social, un filtro que añade efectos a una imagen tomada o archivada. Y al mismo tiempo, expone simbólicamente un mundo virtual-fluido que se superpone al real y rígido. Entendamos esto como si el resultado que produce fuera una fascinante capa matemática de datos y metadatos sobre una superficie, un objeto, un rostro o un cuerpo que se viste, mejora o se estetiza en el contexto de la imagen. Atendiendo a esto, existe algo que no deja de ser una problemática para todas/os en la conversión digital de nuestras vidas, y es la necesidad de establecer límites que nos separe –como sujetos autónomos- del objeto sobre el que nos proyectamos y nos proyecta. Pero, ¿cómo lidiar con el uso de un dispositivo que geolocaliza, que filtra la realidad y la devuelve aumentada?, ¿cómo convivir con lo íntimo revestido de artificio? Este dilema, que se coloca entre el lugar de lo privado y su exhibición en un entorno digital, es lo que produce la fricción en el acoplamiento de nuestros cuerpos a procesadores informáticos que cada vez se sofistican más para generar una mayor sensación de uso intuitivo de lo tecnológico.
Esta artificiosidad, o mejor, esta adquisición de rasgos ilusorios va transformando poco a poco la experiencia directa sobre algo. En los últimos años, a partir de la proliferación de las redes sociales, se está potenciando la exhibición de la vida en sus estadios más vulnerables. Vidas expuestas de forma estratégica al desarrollo comercial, político y social. Una nueva espectacularización tecnológica, con una enorme capacidad de mutación, ocultada por el mecanismo que late y responde desde el interior de la imagen enmarcada, el cuerpo hecho objeto.
*Imagen cortesía de la artista.
*Texto para el libro Stories de Almudena Lobera