Neón – Púrpura (Biblioteca municipal de San Cristóbal de La Laguna)

Desde el Colectivo Cultural Neón-Púrpura formado por el artista Jaoquín Artime y la historiadora y comisaria Dalia de la Rosa, nace Crisis/Decadencia/Transformación como un proyecto expositivo que se desarrolló en el patio de la Biblioteca Municipal de San Cristóbal de La Laguna.


Crisis / Decadencia /
Transformación

La
elección de estos términos viene determinada por la necesidad de aportar un
nuevo análisis a los ya consabidos aforismos dominantes del pensamiento y
comportamiento del colectivo social en estos últimos años de cambio. El hombre
en sociedad vive en una mezcla de soledad y compañía abrumadora. La evolución
de ámbitos que usan una terminología ininteligible para él, términos como
bursátil, prima de riesgo, acción volátil, ibex35, etc., carecen de significación
dentro del imaginario del hombre común. Son vocablos que se demonizan hasta el
extremo y son usados por “expertos” de manera indiscriminada, incrementando la
punzante sensación de miedo en el individuo que los asume como sentencias. Tal
es el poder  de la palabra, cuyo
desconocimiento incrementa el 
desasosiego, la desconfianza y la alarma. Es el conocimiento el que
desvela la mirada, el encargado de hacer del hombre un ser social y humano, y
es el aprendizaje de los significados puros de cada componente del lenguaje los
que otorgan un movimiento evolutivo como conjunto social, porque es la palabra
y la comunicación lo que determina la existencia de la humanidad.

La acción
de establecer un nexo entre los término crisis, decadencia y transformación,
encuentra su argumento en la exigencia auto impuesta de dar cabida a la
multiplicidad de prismas con los que se observa y afronta una circunstancia.
Estas locuciones no son antitéticas, existe una analogía entre ellas que la
entrelaza de manera sucesiva.

La crisis
es un estado transitorio donde lo viejo queda obsoleto, ya no sirve, y es
necesario buscar algo nuevo que lo pueda suceder, no necesariamente sustituir.
Este período de transición estancada y durabilidad variable genera
incertidumbre, miedo hacia lo desconocido, lo no abarcado antes. A la vez
implica evolución al requerir una mejora sustancial para enmendar los errores
del pasado. 

El término
es vasto. Podemos hablar de crisis política, personal, mundial, económica,
emocional, crisis de pareja, crisis de mercados, crisis sanitaria y
medioambiental. Siempre que algo no va como suponemos que debiera y la
situación se tiñe de gravedad hablamos de crisis.

Cuando un
factor cae en la depresión de una crisis es muy probable que arrastre a sus
aledaños consigo. Por eso se relaciona con un sentimiento devastador y
destructivo. A lo largo de la historia el hombre se ha regenerado una y otra
vez. El esplendor precede la gran caída, y la pobreza una era de poderosa
ascensión creativa, en un bucle sin final.
La crisis
que hoy se extiende como la oscura sombra de la sequía por el territorio habitado/conocido,
no sólo responde a una crisis político-monetaria, responde principalmente a una
crisis de valores.

A
continuación deviene la decadencia, un estado de riqueza social ficticia que genera
un período de ambición y competitividad que engendra un sistema de especulaciones
dementes que a su vez inflan una gran burbuja de mentiras. Ahora que la burbuja
ha estallado en mil pedazos, cedida por el ansia inmensurable de la codicia,
algunos tratan de mantener un sistema terminal para seguir lucrándose, pero ya
nada puede apuntalarlo, sólo prolongarlo gracias al miedo que genera la caída y
el deseo de regresar a la falacia que transmitía una falsa seguridad.

Es
habitual que el género humano se regodee en el aspecto negativo de la
experiencia enganchándose a filosofías extremas como la Joie d’habiter obviando la oportunidad que ofrece el cambio, e
instalados en el sopor del estancamiento económico.
La
decadencia es una fascinante quiebra a gran escala, vivida en un letargo que no
permite tener conciencia del colapso social. Existen multitud de motivos por
los cuales una sociedad puede caer en decadencia, de hecho es un movimiento
cíclico que se ha sucedido a la lo largo de la historia debido a colapsos en
las estructuras sociales, políticas, económicas, culturales y medioambientales. 

Joseph Tainter en su libro El colapso de las Sociedades
Complejas
 (1990) describe cómo las sociedades envueltas en un colapso o
decadencia inevitable se adhieren a uno o a varios de los siguientes tres
modelos de comportamiento:

Los dinosaurios: El
mejor ejemplo es una sociedad a gran escala cuyos recursos están siendo
agotados a un ritmo exponencial y la cual no hace nada para rectificar el
problema debido a que la élite vigente no desea o es incapaz de adaptarse a los
cambios predichos. En tales ejemplos los gobernantes tienden a oponerse a
cualquier solución que diverja de su presente curso de acción. Favorecerán la
intensificación y el compromiso de un creciente número de sus recursos para sus
planes y proyectos presentes y para sus instituciones sociales.

Huida hacia
adelante
: Un ejemplo podrían ser las sociedades que sólo funcionan cuando hay
crecimiento. Las sociedades basadas casi exclusivamente en la adquisición,
incluyendo el pillaje o la explotación, no pueden sostenerse indefinidamente.
Tanto la sociedad de los
asirios como
los 
mongoles, por
ejemplo, quebraron y colapsaron cuando no pudieron realizar más conquistas.
Tainter argumenta que el
Capitalismo puede
ser caracterizado como un ejemplo de modelo de Huida hacia adelante dado que
requiere que la economía en conjunto, los sectores individuales y las empresas
crezcan constantemente cada trimestre. Los métodos actuales de extracción de
recursos y de producción de alimentos pueden ser insostenibles, aún en el caso
de que la filosofía del 
consumismo y
de la 
obsolescencia
programada
incentivara la adquisición de un número
eternamente creciente de bienes y servicios para sostener la economía.

Castillo de
cartas
: En este aspecto el modelo de sociedades de Tainter que crecen hasta
ser tan grandes e incluir tantas instituciones sociales complejas que se hacen
inherentemente inestables y son propensas al colapso.
De esta forma, la decadencia no es más que el proceso de algo que se
fragua en otras etapas previas y que se convierten en acción en posteriores. Es
el punto de inflexión en el que la creación se vuelve más proclive a la
revolución formal y conceptual. El colapso, como dice Tainter, es inherente e
inevitable para el hombre en el conjunto de la sociedad.
En el
análisis de estos términos, es l
a transformación el concepto de los
tres escogidos que verdaderamente implica una alteración, un cambio. Normalmente
supone un cambio trascendental perceptible o no. Constituye una modificación o
superación del paradigma de la producción y del excedente occidental, una ruptura
conceptual en términos sociopolíticos, culturales y en la relación del hombre
con su entorno natural. Ese paradigma es la recesión económica que ha expulsado
a millones de personas del marco laboral y por tanto del sistema capitalista.
De aquí derivarán las iniciativas transformadoras pues la premisa de la
abundancia ya no existe.
Es un
principio universal que la energía ni se crea ni se destruye, se transforma. La
naturaleza está constantemente mutando su apariencia, su paisaje y su
territorio. Las mutaciones implican progreso, a pesar de que la escala perceptiva
del hombre es insignificante en relación al entorno o contexto que le rodea, pues
habita en su propia ambición por controlar y disponer del ámbito de los recursos
con tal fijeza que se desatiende la noción de cambio como parte de la experiencia
vital.

Los
cambios quizás suponen una mejora de la situación, pero también un
empeoramiento. No hay fórmulas ni tesis ni dogmas que aporten seguridad en el
proceso, cada paso puede ser un acierto o un fallo. Sin embargo, lo que está
claro es que cuando algo no funciona es inútil perpetuar su existencia, se hace
necesaria una reinterpretación introduciendo elementos autocríticos. La
transformación es el momento de la  construcción, es el proceso de ejecución del
discurso, de la obra, del espacio, etc. La particularidad de la transformación
como desarrollo es la preservación de la identidad. Mientras que en las etapas
conceptuales anteriores se producía un desgarro entre identidad y entorno,
ahora se entiende el proceso de transformación como algo positivo, evolutivo y
conectado con el sujeto anterior a la crisis.
Breve
descripción:
Es un momento
clave tras la huella pesimista y desoladora que está dejando esta recesión que
se prolonga sin horizonte, de forma interminable, por eso, con el incentivo de
abordar este tema candente, el proyecto trata de acercar el arte último de unos
creadores canarios también afectados por la crisis a un público ávido de
novedad y esperanza. Tal vez la visión creativa de los artistas no ofrezca
salida alguna, pero sí luz al seguir apostando por actividades por y para el
pueblo, por un punto de encuentro y reflexión para discutir sobre aquello que a
todos afecta.

La propuesta
pretende ser un estimulante, un paso a favor de lo público subrayando la
importancia de los espacios comunes como lugar donde germina la cultura y el
pensamiento. Por eso, la Biblioteca Municipal de San Cristóbal de La Laguna con
su patio central acristalado se plantea como espacio ideal para llevar a cabo
una serie de intervenciones artísticas que se sucederán durante seis meses, a
artista por mes, dándose cita creadores de distintas generaciones para ofrecer
una mirada rica y variada, para que se produzcan diálogos singulares dentro del
panorama cultural de las islas.

La importancia
de un proyecto de este tipo no está sólo en el uso de un espacio por sus
condiciones innovadoras para el montaje de una exposición temporal, si no que
reside en la dinamización del edificio en su totalidad. El patio como eje
vertebrador y centralizador del espacio, es el elemento irradiador que acerca
la comunicación plástica al público y es susceptible de provocar una expansión
en forma de actividades paralelas.
Proyectamos
dar valor a un espacio patrimonial consagrado por su actividad cultural
ofreciéndole una vida inesperada, nueva, con intervenciones de una selección de
artistas canarios. Las condiciones del patio central son únicas, con su
exterior acristalado, ofrece una vitrina perfecta para que los creadores puedan
llevar a cabo sus propuestas sin que éstas interfieran en la actividad habitual
de la biblioteca.

Es necesario
que el arte se desligue de su aura museística y trate de aludir al máximo
número posible de personas, para eso extraemos la concepción de la obra para
ser expuesta en el cubo blanco y la introducimos en un terreno accesible que
establece una relación diferenciadora con el espectador, mucho más directa. Con
los conceptos Crisis/Decadencia/Transformación como espina dorsal, cada artista
trabajará en torno a uno de ellos, con lo que serán dos artistas relacionados
con cada término. Disponiendo así de seis creadores que expondrán por separado
con una duración de un mes cada uno.

El semestre es
el número ideal para llevar a cabo un proyecto que se ligue al ritmo de la
institución bibliotecaria. Junto con las intervenciones artísticas el proyecto
presenta una serie de actividades con la finalidad de servir de complemento a
la obra expuesta. Entre ellas una serie de charlas que darán la oportunidad al
público de conocer las motivaciones y objetivos que el artista persigue, así
como la ocasión de profundizar en su figura y labor. 
Los discursos
estéticos de los artistas se encierran en marcos intelectuales museísticos. El
cubo blanco se ha convertido en un lugar sagrado en el cual presentar la obra
de una manera aséptica. Aunque algunas disciplinas se benefician de este hecho,
muchas instalaciones se ven desamparadas. Carentes de un contexto que las
englobe, de un espacio real que intervenir, al final, el creador recurre al
simulacro como única posibilidad.

¿Qué ocurriría
si sus obras, construidas para llenar el vacío de una sala, de pronto tuviesen
que adaptarse a un espacio ajeno, accesible, no habitual? El proceso se vería
afectado por las circunstancias y el medio. Se generaría otro diálogo, nuevo,
enriquecedor. Con otro tipo de público que accede a él, ofreciendo una
divulgación cultural más democratizadora, donde el arte se consume porque está
al alcance de la vista.

Debiera ser
una práctica habitual que las acciones artísticas no invadiesen sino que se
integrasen en zonas comunes. Los edificios de la administración pública, por
tanto, se erigen como espacios ideales para fomentar una preparación integral,
diluyendo las fronteras que delimitan, por ejemplo, que pintura y literatura,
al tratarse de doctrinas distintas, han de ocupar áreas diferenciadas.

La biblioteca se
planta como modelo paradigmático de contenedor de palabras y significados. Es
un espacio de conocimiento que impone su propio tránsito corporal y la
acumulación de estos saberes implica la responsabilidad de engendrar individuos
con una mayor capacidad crítica. La noción de biblioteca pública está integrada
en la democracia del conocimiento dispuesto al alcance de todos.

La sociedad
necesita incluir elementos autocríticos en los espacios de alternancia y en el
itinerario de lugares públicos que tienen, cada uno de ellos, una finalidad
concreta. Por tanto no es baladí/intrascendente el uso de un espacio no
museístico para la ejecución de este proyecto. Supone un reto para el conjunto
de artistas participantes contribuir al enriquecimiento de un equipamiento
cultural que contiene obras que a nivel teórico tratan de las artes y de la
comunicación, así como el efecto sorpresivo que las condiciones estructurales
aportan a las obras que intervengan de cualquier modalidad plástica ya sean
intervenciones, esculturas o performance. Se trata de crear mediante los
aforismos  Crisis/Decadencia/Transformación
una relación de diálogo entre contenedor cultural, obra y público, conectando
personas, lugares e ideas.

Es imperante
la necesidad de acercar la expresión artística al público no sólo en distancias
sino tratando temas de rigurosa actualidad y relevancia que atañen y aluden. En
tiempos de crisis como los que hoy afecta al estado español, es relevante, más
que nunca, que se subraye el valor y la importancia del espacio público,
haciendo uso y disfrute de él, ofreciendo nuevas posibilidades para que la
sociedad en su conjunto pueda disponer de un ocio gratuito, sano y educativo.

Tan importante
como es el espacio público en este proyecto lo es el arte público. Por eso el
perfil solicitado es el del creador comprometido que tome como reto intervenir
un espacio no museístico como una oportunidad para que se genere un enriquecimiento
de sus condiciones artísticas, para que la experiencia de contemplar su obra
sea otra, poniendo en valor su nombre y el del un espacio patrimonial.

Se requiere
nuevos espacios donde los artistas nóveles dialoguen con artistas ya asentados
en el panorama artístico insular, nuevos espacios donde se aproxime un tipo de
público diferente, atrapado por la curiosidad y libre del peso del museo como
institución.  

El desarrollo y fijación editorial del ciclo expositivo se trasladó a fanzines correspondientes con cada acción dentro de los episodios.
El texto inaugural de -Crisis- fue:
Yo veo mamíferos.
Mamíferos con nombres extrañísimos.
Han olvidado que son mamíferos
y se creen obispos, fontaneros,
lecheros, diputados. ¿Diputados?
Yo veo mamíferos.
Jesús Lizano  “Mamíferos”

Es un momento clave
tras la huella pesimista y desoladora que está dejando esta recesión que se
prolonga sin horizonte, de forma interminable, por eso, con el incentivo de
abordar este tema candente, Neón-Púrpura quiere acercar el arte de unos
creadores también afectados por la crisis a un público ávido de novedad y
esperanza. Tal vez la visión creativa de los artistas no ofrezca salida alguna,
pero sí luz al seguir apostando por actividades por y para el pueblo, por un
punto de encuentro y reflexión para discutir sobre aquello que a todos afecta.

Ahora vivimos en una mezcla de soledad y compañía
abrumadora. La evolución de ámbitos que usan una terminología ininteligible
para nosotros, términos como bursátil, prima de riesgo, acción volátil, ibex35,
etc., carecen de significación dentro del imaginario del hombre común. Son
vocablos que se demonizan hasta el extremo y son usados por “expertos” de
manera indiscriminada, incrementando la punzante sensación de miedo en el
individuo que los asume como sentencias. Tal es el poder  de la palabra, cuyo desconocimiento
incrementa el  desasosiego, la
desconfianza y la alarma. Es el conocimiento el que desvela la mirada, el
encargado de hacer del hombre un ser social, y es el aprendizaje de los
significados puros de cada componente del lenguaje los que nos otorgan un
movimiento evolutivo como conjunto social, porque es la palabra y la
comunicación lo que determina la existencia de la humanidad.

Establecemos un nexo
entre los término crisis, decadencia y transformación, y encontramos el
argumento en la exigencia auto impuesta de dar cabida a la multiplicidad de
prismas con los que se observa y afronta una circunstancia.
La crisis es un estado
transitorio donde lo viejo queda obsoleto, ya no sirve, y es necesario buscar
algo nuevo que lo pueda suceder, no necesariamente sustituir. Este período de
transición estancada y durabilidad variable genera incertidumbre, miedo hacia
lo desconocido, lo no abarcado antes. A la vez implica evolución al requerir
una mejora sustancial para enmendar los errores del pasado. 
La crisis que hoy se
extiende como la oscura sombra de la sequía por el territorio conocido, no sólo
responde a una crisis político-monetaria, responde principalmente a una crisis
de valores.

A continuación acontece
la decadencia, un estado de riqueza social ficticia que genera un período de
ambición y competitividad que engendra un sistema de especulaciones dementes
que a su vez inflan una gran burbuja de mentiras. Ahora que la burbuja ha
estallado en mil pedazos, cedida por el ansia inmensurable de la codicia,
algunos tratan de mantener un sistema terminal para seguir lucrándose, pero ya
nada puede apuntalarlo, sólo prolongarlo gracias al miedo que genera la caída y
el deseo de regresar a la falacia que transmitía una falsa seguridad sin tener
conciencia del letargo social. Es un movimiento cíclico que se ha sucedido a la
lo largo de la historia debido a colapsos en las estructuras sociales,
políticas, económicas, culturales y medioambientales. 

Creemos que la
transformación el concepto de los tres escogidos que verdaderamente implica una
alteración, un cambio. Normalmente un cambio trascendental perceptible o no.
Constituye una modificación o superación del paradigma de la producción y del
excedente occidental, una ruptura conceptual en términos sociopolíticos,
culturales y en la manera de relacionarnos con su entorno natural. Ese
paradigma es la recesión económica que ha expulsado a millones de personas del
marco laboral y por tanto del sistema capitalista. De aquí derivarán las
iniciativas transformadoras pues la premisa de la abundancia ya no existe.
El espacio de la
biblioteca se plantea como un modelo paradigmático de contenedor de
conocimientos que impone su propio tránsito corporal y la acumulación de estos
saberes implica la responsabilidad de engendrar individuos con una mayor
capacidad crítica. La noción de biblioteca pública está integrada en la
democracia del conocimiento dispuesto al alcance de todos.

Proyectamos dar valor
a un espacio patrimonial consagrado por su actividad cultural ofreciéndole una
vida inesperada, nueva, con intervenciones de una selección de artísticas.
Ahora desligamos el
arte de su aura museística y queremos llegar al máximo número de personas
extrayendo las obras de arte de los museos e introduciéndola en un terreno
accesible que establece una relación diferenciadora con el espectador, mucho
más directa. Con los conceptos Crisis/Decadencia/Transformación como espina
dorsal, cada artista trabajará en torno a uno de ellos, pero no olvidamos que
el pueblo tiene la voz principal y mediante la acción participativa en la calle
y en la biblioteca también queremos dar cabida a las opiniones y sentimientos
de una población preocupada, brindarle un vehículo de expresión como desahogo para
que escriba sus protestas y sus anhelos.



Calendario:
CRISIS

Acción en la calle
22 de Octubre 2012_ Acción en la calle. Recogeremos quejas. A su vez instalaremos una urna en la biblioteca con la misma finalidad a la que se podrá acceder durante toda la semana.
26 de Octubre 2012_ Texto dramatización de Fátima Luzardo e instalación con las quejas.
12 de Noviembre 2012_ Desmontaje.




Julio Nieto
13 de Noviembre 2012_ Montaje.
16 de Noviembre 2012_ Finalización del montaje y encuentro con el artista.
17 de Diciembre 2012_ Desmontaje.


Francisco Torres
18 de Diciembre 2012_ Montaje.
20 de Diciembre 2012_ Finalización del montaje y encuentro con el artista.
21 de Enero 2013_ Desmontaje.











DECADENCIA


Joaquín Artime
22 de Enero 2013_ Montaje.
25 de Enero 2013_ Finalización del montaje y encuentro con el artista.
25 de Febrero 2013_ Desmontaje.
Joaquín Artime © 2013
Papel aluminio hendido con máquina de escribir. 
27,3 x 21 cm.


Encarneviva
26 de Febrero 2013_ Montaje.
1 de Marzo 2013_ Finalización del montaje y encuentro con el artista.
1 de Abril 2013_ Desmontaje.



TRANSFORMACIÓN


Sheila Hernández
2 de Abril 2013_ Montaje.
5 de Abril 2013_ Finalización del montaje y encuentro con el artista.
6 de Mayo 2013_ Desmontaje.




Juana Fortuny
7 de Mayo 2013_ Montaje.
10 de Mayo 2013_ Finalización del montaje y encuentro con el artista.
10 de Junio 2013_ Desmontaje.



Acción en la calle
11 de Junio 2013_ Acción en la calle. Recogeremos sueños. A su vez instalaremos una urna en la biblioteca con la misma finalidad a la que se podrá acceder durante toda la semana.
14 de Junio 2013_ Concierto aún por confirmar e instalación con los sueños.
28 de Junio 2013_ Clausura del proyecto.





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